Odia amarme o ama odiarme?

No importa lo que haga en esta vida, siempre estaré pensando en la forma de como quitármela o tal vez, sólo herirla. Puede que la vida me odie o yo la odie a ella...


Sentado, pensando en cada cosa que pasa a mi alrededor me doy cuenta de que siempre he sido algo cobarde, siempre he dicho cosas que sé que nunca lograré llevar a cabo. Pero, para qué miento? El sólo hecho de pensar que mi vida podría llegar a su fin me reconforta. Sé que están pensando que soy loco, raro y también bobo.. Pero piensen, es fácil acabar con la vida humana. Hoy todo tiene precio y quizás el precio de mi vida se ha devaluado por completo.


Ésta no es una carta de despedida, ni mucho menos algo que tandrán el día que me suicide o que me maten -la que llegue primero- para poder darse cuenta de los actos que son demasiado obvios para mi. Por qué pienso eso? Porque soy consciente de que con el dolor se supera la realidad, con el dolor soy capaz de darme cuenta de que no soy nada más que un simple mortal al cual la vida la duele o a la vida le duele verlo bien. Siempre que estoy "feliz" me acuerdo de todas las cosas que me causaron o me causan dolor de una manera directa o indirecta, pero que lo causan. Duele saber que algún día dejaré de respirar, pero duele más saber que nunca podría estar más al lado de Andrea. Pero por qué la introduzco en el tema? No lo sé, pero demás que debe ser porque nunca la logro sacar de mi mente, siempre está latente en cada respiro que doy. Es ella la misma que calma esas ansias continuas de acabar con un dolor psicológico o físico, pero las calma.


Tan sólo sé que me duele más pensar en una vida sin ella que pensar en la vida sin mi. Ella es mi todo, cada respiro, cada paso... 


Es fácil saber el destino de las cosas cuando se conoce que su curso es demasiado obvio.


La vida creo que odia amarme o ama odiarme.